Para filtrar tus ideas uno de los métodos más sencillos y prácticos es el propuesto en el proceso de Designer Thinking para la resolución creativa de problemas.
Se trata de realizar tres preguntas para encontrar tu prototipo ideal antes de tomar una decisión de llevar a cabo un proyecto, una iniciativa o una solución en general:
¿Es factible?
¿Es viable?
¿Es deseable?
Factibilidad
Es preguntarnos si podemos hacerlo a nivel tecnológico, a nivel de ingeniería y a nivel de recursos en general. En esta etapa las ideas muy futuristas, irreales o fantasiosas se desechan. Es importante que consideres evaluar las técnicas de "conecta y combina" o SCAMPER las cuales pueden transformar esas ideas poco factibles a algo más real.
Viabilidad
Tiene que ver con la conveniencia para el negocio, especialmente en términos de tiempo. Hay algunas ideas que son factibles pero que tomarán más tiempo del que se requiere, es cuando decimos que no es viable.
Deseo
¿Tanto tu como tu equipo realmente quieren trabajar en esa idea?
Se trata de evaluar el factor humano. Recuerda que si hay interés, hay actitud. Si una idea es factible y viable pero el equipo que la desarrollará no está de acuerdo o animado a llevarlo a cabo, nada de lo que emprendan va a funcionar. En este punto debes convencer al equipo (o a ti mismo) con los mejores argumentos o mejor descarta la idea.
Hay una cuarta pregunta que te propongo relacionada con la prioridad. Es probable que tengas varias ideas que cumplen con los tres criterios anteriores pero imposible que puedas desarrollarlas todas al mismo tiempo, es aquí donde debes tomar en cuenta la urgencia o prioridad para tomar la decisión correcta.
Autor
Marelbis Pimentel
Especialista en optimización de procesos
Representante en Europa de Hyggelink
Co autor de la competencia Resolución de problemas en el libro "Y eso, ¿cómo se come?"
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